• Se reconoce el trabajo en gestión de residuos, aseo urbano y desarrollo de tecnologías de gestión sostenible del medio ambiente.
• Los paneles solares en Centro Cívico permitieron ahorro del 39 por ciento en el pago de energía eléctrica.
El Presidente Municipal de Querétaro, Miguel Antonio Parrodi Espinosa, entregó a trabajadores y trabajadoras de la Secretaría de Servicios Públicos Municipales la Escoba de Platino, reconocimiento que obtuvo la ciudad gracias al proyecto Transición Hacia una Economía Circular, donde se enumeran estrategias como: mejora en la gestión de residuos, aseo urbano y desarrollo de tecnologías que permiten una gestión sostenible de nuestro medio ambiente.
“Es un reconocimiento al esfuerzo de tantas y tantos queretanos que por más de una década han hecho la diferencia en favor de las y los queretanos de hoy y de las futuras generaciones; a todas ellas y ellos mi reconocimiento, que sea este premio una motivación más para seguir haciendo de Querétaro una ciudad comprometida con el medio ambiente, una de las mejores ciudades para vivir”, aseguró Miguel Parrodi.
El Alcalde recordó que esta es la séptima ocasión que el Municipio se lleva esta distinción, lo que refleja los años de compromiso de los gobiernos municipales en el esfuerzo e innovación continua en beneficio del medio ambiente y toda la población.
La Secretaria de Servicios Públicos Municipales, Alejandra Haro de la Torre, recordó que cada dos años la Asociación Técnica para la Gestión de Residuos y Medio Ambiente, ATEGRUS, otorga el reconocimiento, y que debido a la pandemia que se vive a causa de la COVID-19, la premiación se realizó hasta este año.
Explicó que el proyecto Transición hacia una economía circular, enumera estrategias emblemáticas como el biodigestor anaerobio del rastro municipal, el aprovechamiento de llantas de desecho, el reciclaje de residuos eléctricos y electrónicos, el manejo ambientalmente adecuado de medicamentos caducos, el tratamiento de pilas y baterías usadas, la planta separadora de residuos, 50 papeleras monumentales, los puntos verdes para compostaje de residuos de poda, la planta de valorización de biogas en el relleno sanitario, la eliminación de bolsas y popotes plásticos, así como la transición a fuentes de energía renovables en las oficinas del Municipio con los paneles solares y la política de uso racional de recursos e insumos.
Un ejemplo de ello es la reciente colocación de 961 paneles solares en Centro Cívico, con los que se ahorra el 39 por ciento de energía; pues se tenían estimaciones de gasto en energía eléctrica por 7.1 millones de pesos y solo ha sido de 2.6 millones de pesos.
“Con estas acciones, Querétaro está transitando de un modelo de producción lineal a uno circular en el cual la cadena de valor se retroalimenta continuamente propiciando un círculo virtuoso en el que ningún recurso se desperdicia y los residuos dejan de ser agentes contaminantes, disminuyendo el uso de materias primas vírgenes y por ende la explotación de los recursos”, concluyó la Secretaria.