El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, defendió este martes la investigación de su Gobierno sobre los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa tras los cuestionamientos del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).
El mandatario afirmó que los elementos que presentó la Comisión de la Verdad de su Gobierno en agosto pasado son “sólidos” aunque el GIEI de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) señaló inconsistencias en al menos 181 de un total de 400 capturas de pantalla usadas como evidencia.
Son elementos sólidos y hay pruebas suficientes, hay más de una prueba en cada caso, es otro tipo de cosas, en el fondo es el deseo ferviente del conservadurismo de que no cumplamos con el compromiso que tenemos con los padres de Ayotzinapa”, afirmó el presidente en su rueda de prensa matutina.
Sus declaraciones se producen después de que el GIEI declaró el lunes que, tras un peritaje, “no es posible garantizar la originalidad de los mensajes” de sospechosos en la desaparición de los jóvenes en septiembre de 2014 presentados en capturas de pantalla en el reporte del Gobierno.
Pero López Obrador respondió que el GIEI se dividió y que es “un asunto complejo”, al denunciar que hay “intereses de por medio” en el caso Ayotzinapa.
“Había una especie de pacto de silencio y mucho encubrimiento porque no solo se cometió esta atrocidad, sino tomaron la decisión de inventar los hechos, la llamada verdad histórica, imagínense lo que ha costado el descubrir lo que sucedió realmente”, argumentó.
La polémica sobre la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa en el estado de Guerrero se ha reavivado en este octavo aniversario por el reporte de la Comisión de la Verdad que reconoció que fue un “crimen de Estado” con autoridades involucradas de todos los niveles, incluyendo el Ejército, y los da por muertos.
Además, la semana pasada, el New York Times publicó que “el caso penal y el nuevo relato se han venido abajo” mientras que el encargado de la Comisión de la Verdad, Alejandro Encinas, reconoció “que mucho de lo que se presentó como evidencia nueva y crucial no pudo verificarse como real”.
Ante los cuestionamientos, el presidente de México le expresó este martes “toda la confianza” a Encinas, subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno, a quien llamó un “hombre íntegro, recto, e incapaz de falsear información”.
“Se tienen todos los elementos para sostener la investigación, y se van a seguir haciendo averiguaciones, y se va a ir consolidando, fortaleciendo esta investigación y se va a hacer justicia”, remarcó.
Sobre los padres de los 43 jóvenes, López Obrador dijo entender “su situación tan delicada, tan triste”.
“Lo que no aceptamos es que estos asuntos tan lamentables sean utilizados por zopilotes (aves de rapiña), por nuestros adversarios conservadores y la prensa que está a su servicio”, sentenció.
Con información de EFE